El domingo 18 de octubre, en el análisis del Futuro del Eurostoxx índice de referencia en Europa) de cara a la semana, advertíamos de que se formó un triple techo en la zona de los 2945 puntos y el lunes (19 de octubre) podría ser completado con un patrón By Pass, con lo que sería un doble motivo para inicio de recortes a la baja.
Así fue, al día siguiente, el lunes 19 de octubre, comenzaron los recortes a la baja.
De momento, no se ha perdido ningún nivel relevante ni en el S&P500 ni en el Eurostoxx50.
Así pues, mientras esto no suceda (y avisaríamos con antelación suficiente), significa que estamos ante una corrección técnica sana.
Si algo nos enseña la historia es que la experiencia es un grado y debe de servir para evitar cometer en el futuro errores del pasado.
Por ello, es interesante comparar la crisis de Japón (que lleva una década) con la actual crisis de España.
La crisis de Japón comenzó en 1992 para prolongarse durante 10 años y seguir aún vigente, periodo caracterizado por tasas de crecimiento muy pequeñas, deflación y depreciación del yen.
Si algo tiene en común con la española es el estallido de la burbuja inmobiliaria, crisis bancaria, falta de poder crediticio, deflación, estímulos monetarios, baja el consumo y el PIB, etc.
Todo comenzó a gestarse en 1990 al estallar la burbuja inmobiliaria que se había formado en los años 80 (precios muy inflados, incremento de los tipos de interés).
Los precios del suelo empezaron a caer y en el año 2003 estaban en el mismo nivel que en el año 1980.
El sistema bancario japonés tenía un alto capital en acciones y propiedad inmobiliaria, de manera que los bancos cerraron el grifo del crédito para poder hacer frente al incremento de morosidad.
A todo ello se sumó una caída del consumo, un aumento del desempleo, incremento de préstamos de dudoso cobro, etc, etc.
Finalmente, en 1997 estalló la crisis bancaria con la quiebra de varias entidades financieras de suma importancia.
¿No les suena todo a esto una "replicant" de nuestra crisis española? Resumamos las similitudes de ambas crisis:
- Desregulación financiera.
- Política monetaria muy expansiva.
- Estallido de burbuja inmobiliaria.
- Aparecen préstamos dudosos, de manera que se cierra el grifo del crédito.
- Cae el consumo, y por tanto el PIB, ralentizándose la economía.
- Aumento del desempleo.
La economía de Japón comenzó a ver una esperanza en el año 2003 (gracias al aumento de exportaciones a China y USA). El problema es que el modelo de Japón se basa en la competitividad internacional y el modelo español se basa en en el consumo doméstico, con lo que es una diferencia notable.
Es decir, Japón financió sus créditos a través de ahorros internos, pero España depende de los mercados internacionales, lo que implica un serio problema si no atrae a inversores extranjeros.
¿Qué recetas nos dejó la experiencia nipona? Básicamente dos:
* Aumentar el nivel de productividad.
* Descenso de costes.
Y tener muy en cuenta que los estímulos financieros y monetarios serán insuficientes si no se pone remedio previamente al paro y la crisis bancaria.
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