Los depósitos bancarios crecientes son una modalidad de los tradicionales depósitos de toda la vida.
Su peculiariedad estriba en que la rentabilidad es diferente cada año, dejando la mayor rentabilidad para el final, de esta manera la entidad bancaria logra fidelizar a los clientes y que permanezcan más tiempo dentro del depósito.
Veamos un ejemplo práctico:
- Cantidad mínima: 5.000 €.
- Vencimiento: 3 años.
- Modalidad creciente: cada semestre aumenta la rentabilidad.
- Rentabilidad:
* Periodo 1: 1,75%
* Periodo 2: 2%
* Periodo 3: 2,50%
* Periodo 4: 3%
* Periodo 5: 4%
* Periodo 6: 5%
- Cancelación: retirar el capital durante el primer año tiene una comisión del 4%. a partir del segundo año no existe comisión.
Pues bien, viendo este ejemplo práctico, el inversor ha de valorar 2 cuestiones básicas:
1º) Si le interesa permanecer en el depósito hasta su vencimiento, ya que es la mejor de las maneras para que sea rentable y le merezca la pena.
2º) Calcular la rentabilidad real y total, es decirl la rentabilidad TAE, que en este ejemplo sería del 3,94%.
martes, 20 de octubre de 2009
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